We love La Condesa

Escribir este post me emociona. Marina Conde, más conocida como "La Condesa" es una de esas pocas personas a las que admiro profundamente y no sólo por los lazos aristocráticos que nos unen (ya sabéis que yo una vez fui Reina de Inglaterra... aunque ahora sólo me haya quedado en protestante, o mejor dicho: ¡en protestona!).

Cuando hace ya casi tres años yo no sabía ni qué era un blog, mi hermana Margot era ya una buena experta en consolidar un reader llenito de descubrimientos. Me habló de "Condesa Conde". Me dijo: es muy maja, te vas a reír. "Reírme yo"- pensé incrédula. No obstante entré. Entré y ya no pude salir. Tuve un enganche, un amor a primera vista, un falling in love de los buenos: la ironía de La Condesa me daba alegría de VIVIR. Dosificaba sus posts como gotitas de oro líquido por lo que conseguía unas tres visitas diarias por mi parte esperando mi "dosis". Me convertí en palmera oficial del reino y durante muchos meses, su blog era mi única lectura 2.0.

Por Marina quise ser blogger. Por "La Condesa" quise ser emprendedora (online).

Y es que aunque bien podría ser escritora, detrás de su santo y seña lo que se esconde es una empresa de confección de prendas únicas. Saltó al estrellato con su primera pieza: una chaqueta de estilo militar. Las "selebritis" y estilistas nacionales comenzaron a llamar a su puerta, desesperados... "¡Quiero esa chaqueta!"... se agolpaban a la salida del taller, hubo hasta huelgas de hambre y todo... Bueno, esto no sé si realmente fue así, pero me gusta imaginarlo de este modo...

Tuvo que abrir una tienda online porque su bandeja de entrada estuvo a punto de denunciarla por explotación indebida. Tienda en la que encontrarás las colecciones que ella misma diseña e incluso cose junto con su equipo. Otra cosa no sé, pero la cabecita de Marina vale su peso en oro.

Para muestra, un botón (y nunca mejor dicho):

MA-TO por una chaqueta "Amalfi". Quiero convertir al consorte en un "Beattle"... Algún día yo también seré una JEFA y tendré de uniforme una "Jagger" para fumar en pipa... Pero lo que seguro, seguro algún día formará parte de mi patrimonio, es una de sus chaquetas BOLENAS:

Seguro que muchas de vosotras ya la teníais fichada y es que aunque en el 2.0 es una "institución", no ha habido revista de renombre que no haya contado con sus prendas para alguno de sus editoriales de MODA:

Eso por no hablar de ELLOS:

(pd.- Disculpas a Pablo Alborán, que se me olvidó incluirlo en la lista sin tener yo nada en su contra...)

Volviendo a la realidad, Marina es de carne y hueso (algo que a muchos se les olvida, volviéndose unos insufribles en el momento en que se creen "alguien"). Es cercana y campechana pero tremendamente profesional. Ha pagado la novatada, como todos, pero jamás ha tirado la toalla. Ni siquiera cuando equivocó el pedido de lazos estampados con su logo y se visualizó con dentadura postiza cortando cada una en diagonal y quemando los bordes deshilachados con mechero. Fan de Coldplay, aún retumba en mi cabeza la canción "Paradise" del concierto que tuvo lugar en la plaza de toros de Las Ventas. Anécdota que utilizó para anunciar la llegada de su heredera. Condesa, no te asustes, me sé tu vida entera pero no soy peligrosa. Eso sí, por tu boda hasta quise casarme en su día ;)

Dicho todo esto, sólo puedo tomarme la libertad de invitaros a su web lacondesa.es donde además de su blog, encontraréis toda la información sobre sus colecciones, apariciones en prensa y por supuesto su e-shop.

¡Nos debemos un pinchín de tortilla de la Reina Madre marinado con Vodka!

Mucha suerte en todo lo que acontezca, Marina,

aunque ya no te haga ni falta.

Hermanas Bolena... y llévame a París de copiloto. Hay que entrar con nocturnidad y alevosía en el apartamento de "Madame Butterfly alias_la fresca adinerada" y llevarnos todo lo que nos quepa en un saco. Y digo UNO porque en el otro se viene el avestruz.