MASTERCHEF | Recetario de concursantes

Son pocas las series o programas que comienzo a ver desde el principio, justo cuando comienza su emisión por televisión. Asidua a twitter, a veces os leo y me pica la curiosidad... No sé si fue estas navidades cuando zapeando topé con un grupete de niños monísimos aspirantes a cocineros. Se trataba de la Edición Masterchef Junior de la que no había sabido nada hasta ese momento. Tampoco me enganché a la edición de adultos (de hecho no recuerdo ni cuándo se emitió) pero en unos minutos quise adoptar a 12 criaturas y en especial a uno de ellos: Aimar.

Si alguna vez tengo un bolenito me lo imagino tal cual: gafitas como su padre, inocente como él solo, valiente a pesar de su edad y sobre todo: A-CHU-CHA-BLE hasta la extenuación.

Masterchef invadía así nuestro hogar consiguiendo lo imposible: desear que fuera miércoles para cenar delante del televisor, masticando un sándwich de pavo que en realidad sabía a ternera con cebolla confitada, pan de amapola y queso de cabra en espuma.

Enganchados desde el casting la primera concursante que entró en nuestros corazones fue sin duda la adorable Churra.

Yo no sé si es que me recuerda a mi madre, a la abueli, a su hermana o a un mix de las tres. Sumado a ese carácter gallego que nos es tan familiar nos empujó a su club de fans sin miramientos. Churra es de esas personas que si te encuentras por la calle se te quitan todas las vegüenzas y le plantas dos besos como dos soles... ¿o no? Eso por no hablar de su elegancia natural y ese color de pelo tan bonito, nada que ver con una señorona con el cuero cabelludo frito de tanta permanente. 

Cada vez que algún "Arquitecto" sale en la tele, Dios mata una gatito llamado Le Corbusier. Me gustaría decir que es casualidad y que Joaquín Torres es una excepción demoníaca pero cuando aquí mi amigo Daniel se descuelga con "la deconstrucción de la patata" recuerdas por qué tus años de facultad fueron un auténtico suplicio... ¡pero a quién se le ocurre! 

Sin embargo y para mi sorpresa, ni de lejos le doy el premio al más "infumable"... quizás porque no le dio tiempo a inventar la "ensalada de vigas con chorizo". 

Ese honor se lo disputaron esta pareja de dos:

Gonzalo y Marina, Marina y Gonzalo... ¿hola?

De la primera aún estamos esperando algún plato apetecible aunque se creyera la reina del pop. Era tan sargentona que el día que fue su niño a verla, me juego un dedete a que pensó: "¡Mierda, este mocoso me va a estropear mi obra de arte!"... "¿Mamá yo qué hago?"... "Tú reciclas ¿vale? pero a los huevos ¡ni te acerques!"...

Gonzalo en realidad era un niño de teta escondido en un cuerpo de adulto. Malmetedor como pocos, cotilla de pueblo, drama-queen de carroza... ¡vaya tufo de guión! Estoy convencida de que viéndole con una patita fuera en cada nueva emisión, le ofrecieron un "sobresueldo" por convertirse en "La Reina Cizaña"... Cada vez que abría la boca subía el pan ¡y las ganas de freírle a hostias en pepitoria!

Calmemos los ánimos con dos de los concursantes más entrañables...

Miguel Ángel, EL ENTERRADOR. Sólo una persona como él podía aguantar los mil y un chascarrillos sobre su trabajo ¡bendita paciencia!... "¿Ya le has dado matarile al centollo? porque tú de eso sabes mucho muahahaha"... Lástima que no te hubieras llevado la pala, querido mío...

Jorge y sus "moléculas" (léase con voz de Punset). Sin duda, uno de esos concursantes que procurando pasar desapercibido y sin destacar precisamente por ninguno de sus platos, no te importaría que llegara hasta el final. Le concedemos el premio "al místico humilde" y le animamos a unir la ciencia con la cocina hasta encontrar la panacea del siglo XXI: una pizza que no engorde.

¿Esta chica quién es? :__D

- "¿Camarerooooo?" 
- "¿Quéeeee?"
- " ¡Una de plastaaaaaaa!" 
- "¿¿¿Una de plasta???"
- "¡Síiii! ¡Con Cristóbal me basta!!"

No te ofendas Cristóbal pero me da que eres un lobito con piel de cordero. "Mucho jiji y mucho jaja, ere un crá" pero te arrimas al sol que más calienta... No obstante, si aguantamos a Gonzalo hasta la saciedad y eso sí que era para colgarse de la higuera, ¡qué remedio contigo Manué!

Con Cristina hay versiones enfrentadas: el consorte no la tolera, a mí sin embargo, ni fú ni fá. Más allá de hacer "pandi" con sus amiguitas tampoco creo que haya dado mucho juego. Lo más interesante de su paso por el programa ocurrió el día que la echaron, cuando ni corta ni perezosa, relató el culebrón de su vida amorosa. ¿Y por qué escribo en prosa? ¡Pues porque llega la Milagrosa!

Milagrosa es el polo opuesto al "pelo de Churra". Más frito que un puñado de camarones, no saldrá de mi boca ni una palabra en su contra desde el día en que hizo "un no-sé-qué en FAJA" y a Pepe se le llenó la boca con todo tipo de chascarrillos que ni mi padre... No le pidas que te haga unos rollitos Thäi con salsa de curry pero estoy segura de que en unos huevos rotos con jamón salidos de su sartén, yo mojaba una barra de pan enterita.

A casa de Celia sin embargo tendríamos que ir a comer hamburguesas de tufo, digo de tofu... Las magdalenas del último programa en el que tuvo opción a "repesca" eran dignas de encarcelarla. 

Mantengo la teoría de que si Jordi no estuviera comprometido hubieran practicado juntos el veganismo...  

Reconozco que de primeras su "rollo zen" me pareció de lo más cansino pero sin embargo, yo no hubiera sido capaz de darle boleto a una langosta viva... hubiera optado por dejarla 5 minutos a solas con Gonzalo y que se suicidara ella misma... ¡la langosta digo!

Lorena me enerva a ratos, coincidiendo con su momento "me retiro el pelo para que veáis que llevo un beso tatuado en el cuello"... Ay Lore, yo no sé quién engañó diciéndote que es de lo más sepsi... ¡parece un chupetón que no cicatriza! Y esa mezcla de brazo izquierdo floreado con tinta china y mecha californiana hacen que entienda por qué Bershka sigue teniendo su público fiel, temporada tras temporada....

Que Mateo es uno de los tres finalistas lo sabemos todos. Que cocina el pollo como nobody in the world, también. Que lagrimea con cierta ñoñez es quizás lo que menos me hace empatizar. Que se dedicará a la cocina profesional en un futuro nada lejano lo saben hasta los propios jueces...

No tengo mucho más que añadir pero es que ya sabéis que soy un poco rebelde y salvo en el caso de "Gonzalito el toca berzas vs Marina la sota de bastos" suelo nadar contra corriente.

Vicky, "carnicera en paro"... 

¡¿Pero qué mierdas de subtítulo es ese?! ¡Suena como a peli de terror, no os parece?

Y no será porque la palabra "paro" no de escalofríos ya de por sí, pero júntalo con carnicera y sal a buscar novio:

- "Hola soy Vicky, soltera y carnicera el paro".

Parece que por la noche vas a despertar en "paro" pero cardíaco tras soñar con el protagonista de Caníbal versión "muchacha mallorquina"... ¡un cuadro!

Con muchas opciones de ganar y favorita para un altísimo porcentaje de audiencia, opino que aunque te corte unas costillitas en un periquete, su fuerte es la repostería sin lugar a dudas. En ese campo es una diosa.

Aquí mi ganador. Y ahora me hacéis unfollow y me matáis con el hacha carniceril de Vicky.

Emil me ha conquistado programa tras programa y no porque te meta un calamar en el corta-pasta para hacer con él unos fetuchini por los que el consorte hubiera donado el bazo.

Hartita de oír críticas de sus compañeros en plan "es un rancio, es muy serio, no hace bromas" yo me he fijado en dos cosas: 

- Ha sido el hijo pródigo. Hasta hace 2 telediarios, ya podía cocinar un cuscús con huevas de cangura que hubiera cazado él mismo que JAMÁS le decían: perfecto. Siempre con peguitas absurdas en plan "que si esto pica, que si el emplatado es feo, que si el queso cheira"... 

Jordi, como diría Julio Iglesias "os la habéis cogido con papel de fumar ¡Y LO SABES!" jajajaja...

- El día que le visitó su ahijada GRETA. ¡¡¿HOLA?!! Si tienes útero fértil y ese día no sentiste un cosquilleo, ve a hacerte una ecografía porque algo te pasa. ¿Se puede tratar con más cariño a una mico? La hizo partícipe de todos los preparativos sin importarle lo más mínimo que le saliera un churro. Dejó que metiera el dedo en todas las salsas, ¡lamió hasta la última de las gominolas! (muchas de las cuales se comió el jurado poco después con su babilla y todo por cierto :D). No dejó de darle besos ni caricias... yo hubo un momento que hasta pensé "no puede ser su sobrina, ¡parece que llevan toda la vida juntos!".

Y ahora es cuando me diréis ¿y qué mierdas tiene que ver todo esto con la cocina? Pues poco, la verdad. Pero es mi blog y lloraré cuando quiera jajajajajajajaja... ¡Oye! ¡Espero no ser la única fan de Emil muchachos! No me dejéis sola en esta cruzada ¡miaj!

Gane quien gane me declaro súper fan de este formato: he reído hasta llorar con el tragaldabas de Pepe, ma-to porque me inviten a una boda organizada por Samantha, enloquezco cuando Jordi saca la lengua a paseo y les da lo suyo y lo de sus primas. Creo que son el jurado perfecto y espero que haya muchas ediciones más porque hasta yo que soy una estresada para la cocina, estoy deseando disponer de una buena encimera para preparar unos platillos deliciosos como hicimos estas navidades ¿os acordáis?...

¡A ver si sacamos tiempo y muy pronto os damos más ideas para completar vuestro libro de recetas! (que por cierto, ya estáis tardando si no os habéis hecho con uno porque ahora está en oferta haciendo click AQUÍ).

Y ahora, contadme:

¿Estáis enganchados a Masterchef? ¿Tenéis un claro favorito?

Hermanas Bolena... deseando saber qué opináis ;)