VIAJE RELÁMPAGO A MADRID | 24 horas "non stop"

Acabamos de recibir un mail de una de nuestras novias del año pasado. Ya se ha cumplido un año desde que ella y su consorte se dijeron ¡sí quiero! y están a punto de celebrarlo en nuestra ciudad, Madrid. Bajarán en tren desde Asturias, se alojarán en un precioso hotel del centro y durante algo más de 24 horas se concederán un capricho detrás de otro. ¡Qué suertudos!

Que soy la persona menos indicada para hablar de vida social y sitios de moda en Madrid lo sabemos todos. Me ha caído la lagrimilla durante unos segundos sólo de pensarlo pero luego he dicho ¡qué demonios! aunque sea entre lo poquito que conocí en su día, lo que me cuentan amigos o la lista de "lugares pendientes" algo en claro sacamos seguro ;)

Ahí van mis humildes sugerencias:

Mercado de San Miguel, Plaza de San Miguel s/n

Mercado de San Antón, calle de Augusto Figueroa nº 24

¿Para un fin de semana justito en Madrid, vas a desayunar lo típico? Yo sin duda me pondría un calzado cómodo y visitaría uno de los dos (o los dos) mercados más de moda de la capital. Es una auténtica tentación comenzar la jornada gastronómica picando un poco de aquí y otro de allá. No digo que a las 10 de la mañana vayas a empezar con vinitos aunque yo podría hacerlo incluso desde las 7 am jajajajaja, pero un brunch improvisado de 11 a 13 puede ser el plan perfecto ;)

Restaurante Lateral, Plaza de Santa Ana

Viniendo de Asturias, por muy fan que yo sea de mi ciudad, no os voy a engañar. No esperéis encontrar restaurantes con carnes o mariscos frescos de la misma calidad que en vuestra tierra, sin donar un riñón. Por eso yo os recomendaría una pequeña cadena de restaurantes cuya relación calidad precio, bajo mi humilde punto de vista, es fabulosa.

En su carta encontraréis platos y pinchos desde 3 €.- Tienen una tempura de verduras  con salsa de yogur para compartir que está deliciosa. Por supuesto siempre caen las croquetas de jamón o boletus, la tosta de foie con manzana, el rollito de salmón o el canapé de mousse de gorgonzola con mermelada de pimiento. Calculo que tendrán más de 30 platitos diferentes por lo que es práticamente imposible decantarte por 5 de ellos que es lo que tenemos calculado como "perfecto para dos".

También es de agradecer que a diferencia de otros sitios en Madrid, puedes pedir vasos de agua sin pagar botella. Te la sirven súper fresquita en vasos monísimos y teniendo en cuenta que el agua de la ciudad es muy buena, da rabia pagar por botellas aquí, ¡eso que ahorramos para vinito o postre!

La cuenta: oscilará en torno a 12-15 € por persona en función de cervezas, refrescos, etc...

A tener en cuenta: no sólo a mí me encanta este sitio. Somos un millón los que repetimos cada dos por tres por lo que recomiendo obviar las horas punta. Si quieres comer, mejor a las 13 que a las 14. O al contrario, a partir de las 16 h. Si quieres cenar, acóplate a un "horario de guiri encubierto" porque teniendo en cuenta que disponen de terraza, cócteles, etc... desde las 21:30 horas eso es un no parar. 

A su favor: salvo que estén desbordados suelen servirte la comida al completo en 10-15 minutos. 

Ubicación: el más céntrico está en la Plaza de Santa Ana pero encontrarás otros en Castellana, Velázquez o Arturo Soria.

En resumen: una manera diferente de tapear por Madrid sin recurrir a las típicas bravas y calamares un tanto aceitosos, que cada vez hacen peor y más caros a 5 km a la redonda de la plaza Mayor.

Para el postre o la merienda, cambiamos el glamour del "tapeo chic" por una heladería donde yo, que no soy fan de los helados, pierdo la cabeza.

Palazzo es un negocio familiar con fábrica propia en un pueblecito de Ávila, justo al límite con Madrid Capital. Además de los clásicos sabores como la vainilla, straciatella, fresa o turrón, tienen 2 delicatessen que merecen ser nombradas con mayúsculas: HELADO DE ARROZ CON LECHE y HELADO DE CHOCOLATE CON COÑAC Y PIÑONES.

El primero sólo lo puedes disfrutar los tres meses del verano. El segundo le vuelvo loco hasta al Padre Boleno que es abstemio. 

En la misma Gran Vía encontrarás 2 delegaciones, así como en la calle Goya, Bilbao, Bravo Murillo, Sol, etc... De hecho, a pocos metros del Palacio Real aún sigue abierta la primera tienda suya que yo conocí. La de veranos que pasé de jovenzuela tumbada en los Jardines de Sabatini comiendo helado con los ojos en blanco... ¡qué tiempos aquellos!

Si aprovechas para callejear por la Latina y acabas en Lavapiés, un atardecer en Gau&Café es un éxito asegurado. Con unas vistas chulísimas y un acceso como de película de suspense (tienes que entrar por la puerta de las Escuelas Pías de la UNED) accedes a esta terraza que está de lo más cotizada:

Gau & Café, calle Tribulete 14, 4ª planta

Una vez allí, tienes 2 opciones: 

A.- Pedirte una caña y no mirar la carta.

B.- Subir y bajar 4 veces las 4 plantas para que te baje el helado y caigas en una de sus tentaciones en forma de tarta casera:

Tarta de chocolate blanco y canela, de queso al estilo New York, Carrot Cake, Tiramisú o Chocolatísimo. Si consigues bajar sin caer en la tentación, te echamos del club boleno jajajajajaja...

Desde aquí hasta la siguiente "prueba de Astérix y Obélix" os dejamos un margen de 1 hora para volver al hotel, cambiaros y salir a cenar.

Lamucca, calle Prado nº16 (encontrarás a su hermano mellizo en Lamucca calle Pez, 

aunque es más vistoso el primero).

Bajo el eslogan "Come, bebe ¡y llévate los muebles!" Lamucca es uno de esos sitios que de pronto todo el mundo conoce. 

Lo que antes era el antiguo "Café del Prado" se ha convertido desde hace unos años en un restaurante desenfadado y chic donde puedes degustar una hamburguesa, un tataki de atún o un plato de pollo al curry y pedir que te ponga la silla y la lámpara "para llevar".

No puedo aconsejaros en cuanto a la relación calidad precio porque es uno de mis "pendientes", sin embargo su pizza de boletus con trufa ha llegado tantas veces a mis oídos que de este verano no pasa.

Si queréis jolgorio, música y ambiente, pedid la pizza y me contáis si su fama es merecida. Si buscáis un sitio romántico para haceros ojitos, mejor cambiamos de destino:

Restaurante del Ateneo, Santa Catalina 10

Justo a la vuelta de la esquina nos encontramos con el restaurante del mítico Ateneo de Madrid. Con un interiorismo chulísimo y apenas 10 o 15 mesas, es el lugar perfecto para cenar con un enamorado. 

La última vez que estuve me quedé con ganas de probar la burrata, el foie mi cuit y las croquetas de ibérico. Optamos por un entrante más ligero para compartir que consistía en una parrillada de verduras cortadas como el papel con una fina capa de queso provoleta por encima. Demasiado "sútil" para mi paladar... Si tenéis las opción de probar la burrata, el foie o las croquetas, yo no me lo pensaba.

De segundo pedimos solomillo de buey para la que escribe y de jabalí para el acompañante. Teníamos dudas sobre ambos platos antes de catarlos. No hay nada que me de más rabia que pedir carne y aparezcan con una miniatura muy bien presentada que te da para bocado y medio. Entre eso y un chuletón que se salga del plato hay un término medio y aquí, en el Ateneo tienen el punto perfecto.

"En casa del pobre, reventar antes que sobre"... su torrija de Bayleis caramelizada con helado ¡cayó! ¡y vaya sorpresa! una delicia... Dejamos incluso de hablar hasta que no quedó una miguita en el plato. 

Con ganas de volver ;)

The Roof, Hotel ME Madrid, plaza de Santa Ana, 14

Y qué mejor plan que acabar la noche subidos a un tejado. The Roof es la terraza del Hotel ME y está considerada como una de las 10 mejores de España. Margot celebró su 26 cumpleaños aquí y por lo que me cuenta, merece la pena degustar un rico cóctel ;)

Eso sí, después de una jornada gastronómica tan completa corréis el riesgo de quedaros dormidos en uno de los sofás pero oye, ¡vaya 24 horas más aprovechadas!

Sea cual sea vuestro plan, esperamos que la celebración de vuestro primer aniversario sea la primera de muchas y si no fuera porque cuando vosotros bajáis, nosotras subimos al pueblito bueno, un cafetito (con hielo) nos tomábamos seguro.

Y ahora me despido y me dirijo a las madrileñas y madrileños de nacimiento, de adopción o expertos turistas de nuestra ciudad:

¿Qué más sitios chulos nos recomendáis a todos?

Hermanas Bolena... si has leído el post con el estómago vacío, ¡perdóname! merezco un castigo ejemplar ;)